«Quitar el pañal» es la frase más corta y más complicada del mundo de la maternidad y la crianza. Además, se suma la diversidad de criterios según con que especialista hables del tema. En mi experiencia como madre es que cada niño es un mundo. Yo tengo dos niñas, he vivido dos veces la operación pañal y han sido muy distintas. Os explico mi experiencia y vosotras valoráis.
Operación pañal Bella
Lo de Bella me vino por sorpresa total y poco preparada a mi, como madre. Vino un día del mes de junio su profesora y me dijo que Bella estaba preparada para quitarle el pañal. Bella tenia 22 meses y hacia solo dos meses que le habíamos dado el titulo de hermana mayor y me parecía pronto para darle otra responsabilidad. En un principio con una niña de dos meses no era buen momento para mi… Le hice esperar hasta principios de julio y como ya hacía pipí en el orinal en la escuela me decidí. En tres días tenia totalmente controlado el pipí y la caca. Algún escape sin importancia.. (en plan que no le daba tiempo a bajarse el pantalón y que arreglamos vistiéndola con vestidos) pero lo pilló rápido. Creo que no es habitual que dominen los esfínteres tan pronto, es más, no lo recomiendan, pero en la guardería sus amiguitas eran más mayores y ella las imitaba. El problema viene cuando te lo han puesto tan fácil… y viene la pequeña Rapunzel y te rompe todos los esquemas.
Operación pañal Rapunzel
Aquí la historia es: mamá que se viene arriba por el buen resultado con la mayor, estoy sin trabajar o sea tengo más tiempo, la pequeña es muy espabilada, habla perfectamente desde los 15 meses y tiene a su hermana de ejemplo. Así que cuando Rapunzel tenía 26 meses y vi que: empezó a retener el pipí y avisarme enseguida que manchaba el pañal me tiré a la piscina (sin agua). Resultado: fueron los peores quince días de mi vida. La princesa retenía el pipí horas y horas sin conseguir que se sentará en el orinal, wc o cualquier recipiente alternativo para hacer sus necesidades. Solo hacía pipí encima mío o en el orinal volador*.
* Orinal volador es un orinal que yo cogía en brazos con la niña sentada en el durante interminables minutos mientras bailaba, cantaba y hacía todas las payasadas que solo una madre sabe hacer. Si, acabó con mi espalda pero también con mi paciencia y energía.
Además, retenía la caca hasta el pañal de la noche. Así que fue un proceso difícil y lento por una sola razón: no estaba preparada. Me equivoqué.
Consejos para quitar el pañal
- El niño es el que tiene que estar preparado. Debe pedir pipí y caca antes de hacerlo (no una vez hecho).
- La edad es un factor sin mucha importancia, lo importante es que entienda bien los conceptos, por desgracia los niños tienen que empezar la educación infantil sin pañal, así que el sistema nos dice erróneamente que debe ser antes de entrar a la escuela. Sin tener ni siquiera en cuenta que muchos niños entran con menos de tres años al colegio.
- La mejor época para hacerlo es en verano, eso no tengo ninguna duda. Los pocos escapes que tuvimos con la mayor fue por el tema de sacar tanta ropa (bajar pantalones, ropa interior…)
- Curiosamente a muchos niños les da asco o miedo hacer caca en el orinal prefieren hacerla en el pañal… esto tenerlo en cuenta.
Si estáis seguro que vuestro hijo esta preparado os recomiendo:
- Que tenga un cuadro o panel de recompensa cuando lo haga bien. No hace falta complicarse que nosotros poníamos «gomets» de estrellas detrás de la puerta del baño.
- NO hay que castigarlo y hay que mantener la calma y la paciencia cuando las cosas no salen como a nosotros nos gustaría.
- Comprar un orinal molón o personalizarlo vosotros con pegatinas y purpurina…
- Comprar ropa interior que le venga holgada y que escojan ellos de algún personaje que les guste.
- Intentad los días que estáis en el proceso no cambiarlo mucho de hábitos y sobretodo de orinal o lugar donde va a hacer sus necesidades. Nosotros cargábamos con el orinal en el maletero.
- Tanto Rapunzel como Bella se llevaban a sus muñecos a hacer pipí al orinal y hacían pipí ( si nos daba tiempo) antes que ellas y eso lo veían como un juego divertido y nos puede ayudar a ver si realmente están preparados.
Mi conclusión es que ningún niño es igual y que debemos respetar el ritmo de niño, que no siempre es el mismo. No es más listo por quitarle antes el pañal ni es más tonto si aún lo lleva. Conceptos como el lenguaje y la lectura, el calculo mental o incluso el control de esfínteres son procesos que si respetamos la maduración del niño y cuando realmente están preparados pueden ser muy rápidos de aprender. Evitaremos así el estrés innecesario del adulto y el niño.
Abrazos virtuales,
@mamaeconomista
Hola mamaeconomista!!
Gran tema!!! Realmente es así, los niños han de ser los propios protagonistas de sus aprendizajes, son los que deciden si quieren o no llevar pañal. Los adultos estamos para acompañar, motivar, guiar… pero siempre desde el respeto a sus gustos, decisiones, necesidades, intereses… No hay que desanimarse si un peque lleva pañal y sus amiguitos no, cada niño tiene su ritmo de aprendizaje y hay que respetarlo. El proceso de control de esfínteres es uno de los más importantes para ellos y han de vivirlo de forma positiva y feliz. ¡Solo hay que mirar sus caritas cuando consiguen hacer pipi o caca, es de superación, de felicidad, de sentirse «grandes»!😉
Ánimo para aquellas familias que estan o estarán en el proceso, creer siempre en vuestros pequeños!!😊
Gracias! Como siempre la opinión de las expertas es muy bienvenida! Y es que cada caso es un mundo 🌎