Os quería hablar de mi experiencia personal sobre escoger guardería. Para que os hagáis una idea de lo que tiene que ser una guardería, aquí en Cataluña se le llama: Escola Bressol (Escuela de Cuna) o Llar d’infants (Hogar para niños). Siempre me han gustado más estos nombres ya que reflejan mejor lo que tiene que ser el lugar donde estarán tus hijos en edad preescolar.
Tengo que admitir que el azar jugó un papel muy importante y, a mi favor, en el momento de escogerla.
Recuerdo perfectamente el día que fui a las puertas abiertas de la guardería municipal. Llevaba en brazos a mi hija de 8 meses, agarrada fuerte, resistiéndome a lo que se avecinaba.
Oí la charla de presentación de la escuela como si no fuera conmigo, me enseñaron las instalaciones, me hablaron de Montessori, Warldof, psicomotricidad… (eran conceptos que desconocía).
Y en mi interior me preguntaba… ¿Van a cuidar de mi hija como si fuera yo? ¿Van a mimarla como se merece? ¿Van a respetarnos como familia?
Busqué a alguien a quien exponer mis dudas y encontré a dos profesoras hablando y las abordé con mil preguntas… Una de ellas me respondió y recuerdo, después de 4 años, cada una de sus palabras, me respondió con ternura, franqueza, empatía y con una extrema sensibilidad.
Me fui tranquila, convencida que debía ser esa la escuela donde debía llevar a mí pequeña y que esa era la profesora a la que debía confiar mi bien más preciado: mi tesoro.
Aún así fui a ver el resto de escuelas y ninguna me dio la calidez de esa maestra.
La suerte quiso que 4 meses después descubriera que aquella profesora sería la profesora de mi hija mayor y que ahora sea la de mi pequeña. Que mi primera impresión, mi feeling, la confianza que me dio ese día no ha cambiado ni un ápice, que me voy tranquila todos los días sabiendo que mi hija esta en buenas manos y que cuando hablo con ella de cualquier cosa que me preocupa me trasmite tranquilidad, serenidad y buen hacer.
Mis hijas han tenido sin ningún tipo de dudas la mejor maestra en la mejor guardería. Han disfrutado y disfrutan de amor, atención, paciencia y educación. Todo el personal de esa escuela son puro amor y les dejaría a mis hijas con los ojos cerrados.
Educan en base a Montessori, Waldorf y Reggio Emilia. Educan en el amor, en las emociones y en las experiencias. Exploran, experimentan y disfrutan. Y lo más importante se esfuerzan diligentemente para que nuestros hijos sean FELICES.
Lo mejor es que ahora que ya me marcho y siento esa escuela como mi casa, mi familia. Sé que hemos sido unos privilegiados porque mis expectativas eran muy exigentes y encontré un lugar donde mis hijas han sido inmensamente felices y que de eso se trataba….
Abrazos virtuales,
@mamaeconomista
Cuanta razón amiga virtual😉.
Hola bonita!!!! Estoy de acuerdo contigo de principio a fin!!! Para empezar el nombre en catalán es muuuuucho mas bonito!! En mi caso también acabé en nuestra guarde por azar, ni siquera tuve tiempo de ir a la puertas abiertas porque mi peque tuvo que empezar antes. Acabé en ésta (Barrufets) y ahora digo POR SUERTE!!! Dejé lo más preciado de mi vida con una persona maravillosa con solo 4 meses, me fui llorando de pena de dejar a mi niño tan pequeñín pero cuando después pude hablar con ella entendí que no podía quedarse con nadie mejor, que con la que es ahora una muy buena amiga y al año siguiente le tocó con una gran maestra, guía y mejor persona, tanto que estuvimos preguntándonos todo el verano del último curso: “qué vamos a hacer sin ti Meri?”. Este año volvemos a la guarde con la princesa, solo espero repetir experiencia con ella, con la que fue mi primera gurú de crianza, a la que agradezco, además de su implicación y amor a mi hijo, tantos consejos de mamá que me dio. La verdad es que estuve y estoy muy agradecida de haberme cruzado con tan buen equipo en general, que quizá sea lo más importante de una Llar d’infants!
Yo también llevé a mi hijo a esa guarde!! Y muy contentos la verdad!!